El Cuido Ambiental & El Autismo; Mi gran tema como mamá cuidadora .

“Un cuidador de una persona con autismo, es un cuidador de la naturaleza, por naturaleza...” Beatriz Escalona. Madre-cuidadora de Fundelf.

Nosotras, las familias con autismo, nos hemos convertido en los grandes ecologistas y descontaminantes del planeta por pura sobrevivencia. Siempre había dicho que nuestros hijos, eran los "corronchos limpiadores" de la "pecerita "donde vivimos; comenzando por nuestros propios desechos y contaminación generada entre otras tantas causas, por los equipos eléctricos, basura, cigarrillos, gas, productos de limpieza químicos, de nuestros hogares y entornos.
Pero ahora, a más de 16 años del diagnóstico de mi hijo con “autismo moderado” y habiendo pasado casi a “severo” (por sus crisis de adolescencia y post-operatorias- toxicas, debido alergias, a sedantes, antibióticos y anestesies e hipersensibilidad a medios ambientales contaminantes desde su temprana infancia), he comprendido que ,el autismo no sólo es un espectro fijo sino movible, que si bien se agrava por la contaminación, también se puede mejorar gracias a que la plasticidad cerebral no tiene edad para darnos buenas noticias o respuestas. Que la medicina alternativa es generosa con el autismo y compatible con la sensibilidad de nuestros hijos. Que nuestras terapias con delfines son más que “una esperanza en el mar” Que nuestros encuentros con caballos son una divertida rehabilitación. Que nuestra maravillosa naturaleza y equilibrio están “a la vuelta de la esquina” pero eso sí, mientras no contaminemos.
Hoy, Ernesto,nuestro hijo con autismo de ya 19 años cumplidos, gracias a su exitosa respuesta a este tipo de terapias naturales está calmo, recuperándose poco a poco y yo diría, regresando a un autismo “leve” conductualmente, desde su bien limitada forma de expresarse y comunicarse.
“Después de la tormenta, viene la calma” Esta serenidad me hace sentir muy honrada como la madre cuidadora que soy de uno de mis hijos, Ernesto, sobre todo después de estos difíciles meses que hemos pasado como familia, con su cuido y recuperación luego de una complicada operación de cordales y a los dolorosos difíciles días finales de su abuelita, que tuvimos que vivir los dos juntos...esta vez los dos, como cuidadores a principio de este año. Estoy muy agradecida con mis familiares e instituciones que nos dan apoyo. Quiero agradecer ,sobretodo, a mis vecinos con quienes comparto por más de veinticinco años, una extraordinaria vida en comunidad. Con quienes hemos vivido tanto las crisis de autismo de Ernesto, como sus mejores momentos de crecimiento en amor, bajo un mutuo respeto y aceptación. No saben como les agradezco que apaguen los cirgarrillos cuando ven ir o venir a Ernesto en escaleras, patios y pasillos. Que fumiguen el edificio con lo menos tóxico para que no convulsione. Que cuando pinten lo hagan a horas cuando Ernesto no está y con pinturas especiales. En fin pienso que es sólo con un trabajo en equipo, con la red de vida de las comunidades que acogen a nuestros hijos, como podremos realmente combatir el autismo. La vida en comunidad es una necesidad. La comunidad es la cuidadora por excelencia. Por eso hoy más que nunca quiero compartir que la vida en comunidad nos engrandece, no sólo con el compartir con todos aquellos que pertenecemos a familias con TDH y Autismo,( las mayores víctimas de los daños ambientales por ser más vulnerables a la contaminación o porque quizás, es simplemente lo que nos toca vivir como generación de tránsito con mayor intensidad) sino con la experiencia y las lecciones de vida con otras familias patrocinantes o colaboradoras y otras discapacidades, las maravillosas convivencias dentro y fuera de nuestra fundación (FUNDELF) y que contribuyen a nuestra madurez, crecimiento y mejoras en nuestro servicio.
Haciendo un estudio de las familias mayormente afectadas por el estrés y la contaminación, el mayor reto lo tenemos nosotras, las familias marcadas por el estigma de la contaminación ambiental. Somos nosotras a las que realmente nos toca dar el SOS mundial. para detener al Autismo, dando testimonio de nuestros casos a nuestras comunidades, países, continentes, planeta. Porque ya no se trata de animales y bosques en peligro de extinción .Se trata de asegurar un mejor destino para nuestra propia especie humana: evolución y cambios de paradigmas. Fundamentalmente mejorar la calidad de vida ambiental. Proponer
otra Cultura del ser en su hacer...Este es nuestro sagrado deber con la familia planetaria.
Nuestros creadores nos entregaron este planeta para ser sus cuidadores. Pero se está desbastando la biología del planeta de una manera alarmante, poniendo en alto riesgo nuestras vidas. ¿Acaso nos tocó el autismo para sanar esta cultura fisica,sicológica y espiritualmente?

La contaminación de metales pesados está modificando las más delicadas estructuras cerebrales y genéticas comprometidas con el autismo y el TDH.

LA CONTAMINACION AFECTA NUESTROS CEREBROS
Tanto a nuestro Sistema Nervioso Entérico que recorre en forma de malla, nuestro tubo digestivo desgastado por los abusos de generaciones anteriores por aditivos y por donde hoy, lamentablemente procesamos toneladas de alimentos “chatarra” y en donde se producen neurotransmisores tan importantes como La serotonina (reguladora de nuestras emociones)…
Tanto peor con lo que ocurre con nuestro Sistema Nervioso Central, eje o timón, de nuestra vida biológica, emocional, espiritual y de nuestra evolución humana.
La salud del ecosistema del planeta, es una responsabilidad para el futuro de todos. ¡Imagínense para nosotros, las familias con discapacidad intelectual (DI) tan ya afectadas!

Tomemos algunos ejemplos de noticias en la red:

“Las Toxinas y la contaminación ambiental causan alteraciones bioquímicas: muchos individuos autistas tienen niveles elevados de serotonina en sangre y en líquido cefalorraquídeo, pero otros lo tienen disminuido. Es importante saber que otros trastornos, como el síndrome de Down, también se asocian con niveles anormales de serotonina.”

También se reportan anormalidades físicas, a partir de las toxinas y de la contaminación en algunos cerebros de personas con autismo, específicamente la reducción o atrofia de la amígdala y del hipocampo.
(Fuente: Educa-red El Trastorno Autista .Mayo, 21, 2009)

CONTAMINACION= PARKINSON Y ALZHEIMER
Planeta Azul.04.23.08
“En busca de crear una cultura de salud”
ESTADOS UNIDOS; 23 abril 2008.- En 2002, una investigación realizada por científicos de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill encontró que los perros que crecen en la altamente contaminada ciudad de México presentaban daño neurológico y lesiones cerebrales.
Desde hace bastante tiempo los científicos han sospechado que el hollín generado por el diesel y otras formas de contaminación por partículas finas puede terminar en el cerebro.
Las partículas son tan diminutas que son capaces de entrar en el torrente sanguíneo a través de los pulmones y posteriormente atravesar las paredes de los vasos sanguíneos que cruzan por el tejido cerebral.
Ahora, Investigadores de la Universidad de California están realizando un estudio sometiendo a roedores al contaminado aire del sur de aquel estado. Los roedores han mostrado cambios en sus cerebros similares a los encontrados en gente con Alzheimer y Parkinson.



Toxinas Causan el Autismo. 08.04.09.
Dr.Javier Hernández, Medico del DAN (Autism Research Institute) y miembro de la Academia Americana de Medicina del Medio Ambiente.
“Químicos en el ambiente alteran el metabolismo:
El mercurio ataca a los glóbulos blancos, encargados de mantener la cantidad exacta de la cándida, una bacteria que equilibra la flora intestinal. Cuando este hongo crece se convierte en parásito y no permite el funcionamiento de la flora. No se puede vacunar a todos los niños por igual, porque algunos son susceptibles a este metal. En Estados Unidos se realizó un estudio a 1.500 niños y desde el 2003 no usan mercurio en las vacunas, entonces ¿por qué no hacerlo en nuestros países?Lo primero es quitar los contaminantes, (…) crear un ambiente extramuros (casa y escuela) lo más ecológico posible. (…)La leche es un buen alimento, pero no para todos. En niños autistas afecta el sistema nervioso e irrita el cerebro. (…)
El azúcar* es un hiperactivo innecesario que al principio reanima pero más tarde deprime. No aporta en vitaminas o minerales (*si está refinada)
En los últimos 20 años las alergias y casos de asma han aumentado en un 400%, y el 50% de niños autistas son alérgicos o asmáticos. Todo ello es debido al uso de químicos y toxinas en los alimentos”

Si tomamos los casos mundiales de Autismo, nos perdemos ya con las cifras…Hay muchas familias aún sin ser diagnosticadas…Pero el unirnos en bloque como discapacidad Intelectual será una sola Voz y una gran fortaleza.
Desde que se han profundizado las investigaciones científicas de nuestra discapacidad, hemos llegado al fondo del asunto: a descubrir que la mayoría de las discapacidades intelectuales también están asociadas a un trastorno biológico por toxinas y contaminación ambiental (sea biológica, emocional o social, en términos sistémicos)
Entonces familias con discapacidad intelectual, salvemos a nuestros hijos, nietos y futuras generaciones de la pandemia del autismo, de todos los efectos de su espectro. Cuidemos nuestros Lagos, ríos, delfines, legislemos para frenar los abusos de la contaminación…
Logremos la prevención mundial de la Discapacidad Intelectual. Recurramos a la descontaminación ambiental y a los tratamientos Biológicos . Hay mucho por hacer en este deber ser. JUNTOS:
Cada cerebro es un mundo, pero el planeta es el gran cerebro.
Beatriz de Huncal. Madre fundelf.